23/ Abril/2020
Chespirito, un ídolo mexicano para el mundo
Diego A. Hernández Ortiz
Una muestra de la relevancia que ha alcanzado el trabajo de Roberto Gómez Bolaños –sin duda, uno de los más grandes escritores, comediantes y actores en la historia de la televisión nacional– es la fama que logró más allá de nuestras fronteras. Tal como afirmó el exfutbolista de origen argentino Gabriel Caballero en entrevista exclusiva para este blog, Chespirito, quien siempre estuvo muy orgulloso de su país, es “un ícono de la televisión mexicana, un representante de México y un ídolo; una de aquellas personas que han dejado el nombre de México en lo más alto en todos los lugares del mundo”.
Gabriel Caballero llegó a estas tierras para jugar con el conjunto de la Comarca de 1996 a 1998; de ahí pasó a formar parte del Pachuca, en donde cumplió tres períodos (1998-2002, 2003-2004 y 2005-2009), antes de retirarse de las canchas. Además, durante unas breves temporadas utilizó la casaca del Atlas y del Puebla. En 2002, formó parte de la Selección Nacional de México en el Mundial de Corea-Japón como naturalizado, luego de que el técnico Javier Aguirre solicitara sus servicios. A nivel de clubes, ganó siete títulos del Máximo Circuito –seis con los Tuzos y uno con Santos–, fue triunfador en la Liga de Campeones de la Concacaf con los hidalguenses en dos ocasiones y obtuvo, con la misma institución, la Copa Sudamericana en 2006, tras derrotar al Colo Colo de Chile.
El actual entrenador del equipo de Primera División del fútbol mexicano Juárez FC recordó la admiración que le tiene a Gómez Bolaños y la importancia que su programa alcanzó en el sur del continente: “En Sudamérica crecimos con el Chavo del 8. Me acuerdo de que en la televisión argentina siempre lo veía; se veía ya tarde en Argentina, lo veía en mi casa. Es más, siempre que voy a Argentina y me ven familiares o amigos, me dicen: ‘Ya llegó el Chavo del 8’, pues siempre ha tenido el reconocimiento de todos”, comentó entre risas el pampero.
El Tuzos de Pachuca fue uno de los equipos donde “El Eterno” tuvo sus mayores momentos de gloria cuando jugó de manera profesional, y en un partido en Costa Rica, en el que defendió los colores de la Bella Airosa, pudo conocer a uno de sus más grandes ídolos: “Tuve la fortuna de que, cuando fuimos a jugar un partido a Costa Rica por parte de la Concacaf, Chespirito estuvo en el hotel donde nos quedamos nosotros; ahí pude saludarlo, no sé si sabía o no quién era yo, pero pude saludarlo. Salió con doña Florinda del hotel, lo vi y lo fui a saludar”.
Por último, el estratega dio a conocer su personaje preferido y cómo le hizo más sencilla su llegada a México, en 1996, para defender los colores de Santos Laguna: “El Chavo del 8 es mi favorito. Las bromas que hacía eran geniales y no parábamos de reír. Gracias a él conocí los chistes mexicanos y me los aprendí; cuando vine para acá, ya conocía las bromas y entendía lo que mis compañeros hacían o decían”, concluyó el canterano de Central de Córdoba, de Argentina.