30/ Enero/2020

El Chavo: un tributo musical

El 23 de agosto de 2019 se estrenó en la ciudad de São Paulo, Brasil, el espectáculo “Chaves: um tributo musical” –un emotivo homenaje a la icónica creación de Roberto Gómez Bolaños–, justo un día antes de que se celebrara el aniversario número 35 de la primera emisión de “La vecindad del Chavo” en aquel país. En un principio, parecía muy difícil llevar a cabo la propuesta de su productora, la actriz brasileña Adriana del Claro; ¡tan sólo imaginar a otros actores interpretando a los personajes de la vecindad e, incluso, dando vida a Roberto Gómez Bolaños parecía una locura! Sin duda alguna, sería un reto muy grande que provocaba más dudas que certezas.

A pesar de lo anterior, Del Claro obtuvo la autorización para trabajar en el diseño y la historia de su espectáculo teatral. El contacto con México se establecía por medio de videoconferencias; sin embargo, aunque ya habían pasado varios meses, era muy poca la información que se tenía del proyecto, así que la incertidumbre era cada vez mayor. Cuando por fin se dio a conocer la sinopsis de la trama, ésta dio lugar a más dudas y temores. La premisa básica era la siguiente: “Roberto Gómez Bolaños llega al Cielo de los Payasos”. ¿Cómo podría conciliarse un concepto como “La vecindad del Chavo” con otro tan distinto como aquel mágico mundo de los payasos? Pero la productora Adriana del Claro mostraba una completa confianza en el éxito del proyecto, así como un gran cariño y respeto por la obra de Chespirito, así que se tomó la decisión de seguir adelante con su propuesta.

Poco tiempo después, se dio a conocer el elenco brasileño que representaría a los personajes y al propio Roberto Gómez Bolaños. Aunque había ciertas semejanzas físicas, la admiración que provocan los actores originales hacía difícil aceptar estas nuevas “versiones” de los habitantes de la vecindad. No fue sino hasta unas pocas semanas antes del estreno que fue posible asistir a un ensayo general de la obra.

¡El inicio fue impactante! Se trató de un número musical en el que se presentaba a un grupo de payasos encargados de autorizar la entrada al Cielo de los Payasos. Conforme transcurría la representación, la historia mezclaba momentos de mucha emotividad con otros de maravillosa comedia. Al finalizar, todas las dudas y los temores se disiparon; todos estaban admirados y agradecidos por esa historia que desbordaba ingenio, profesionalismo y mucho amor por cada uno de los personajes de la vecindad. Tomó varias horas recuperarse del asombro que provocó el espectáculo ofrecido por esa gran compañía, llena de talentosos actores y creativos. ¡La obra superó cualquier expectativa! ¡Nunca se había visto un homenaje tan emotivo como este bello tributo musical!

La peculiar historia que se narra en este musical –dirigido por el reconocido Zé Henrique de Paula– fue escrita por la multipremiada escritora brasileña Fernanda Maia. A grandes rasgos, trata de lo siguiente: en la aduana del Cielo de los Payasos, un pequeño grupo de ellos se encarga de autorizar la entrada a quienes reúnen las condiciones necesarias, es decir, llevar el atuendo adecuado –maquillaje, nariz y zapatos– y, sobre todo, haber cumplido la difícil pero hermosa misión de hacer reír a la gente. En la fila de aspirantes hay tres personajes. Dos de ellos se identifican claramente como payasos y, luego de responder de manera satisfactoria a las preguntas que les hacen, son aceptados. El tercer personaje es un hombre sin atuendo, ni nariz ni maquillaje de payaso. Se trata, a simple vista, de un hombre común y corriente. Esto asombra a los payasos de la aduana, quienes, en primer lugar, le preguntan su nombre. El personaje responde: “Soy Roberto Gómez Bolaños”. Entonces los guardianes del Cielo de los Payasos le preguntan por qué quiere entrar a ese lugar, si es evidente que no es uno de ellos y que, por lo tanto, no pudo haber llevado alegría a la gente. Roberto Gómez Bolaños les responde que él creó “un lugar donde viven personajes muy especiales” y los lleva a ver la vecindad del Chavo, en donde los payasos conocen a Quico, don Ramón, la Chilindrina, doña Florinda, el profesor Jirafales, doña Clotilde, Ñoño, Godínez y, por supuesto, al Chavo. Los payasos quedan sorprendidos al ver cómo la gente ríe a carcajadas con las ocurrencias de los famosos personajes.

En este gran homenaje hay también números musicales –algunas de las canciones fueron compuestas por Chespirito y otras fueron creadas para el espectáculo– y una gran coreografía, así como impactantes ensambles vocales. El vestuario, las caracterizaciones y la escenografía recrean de manera sorprendente y fidedigna el universo creado por Chespirito. Además montaron, en el lobby del teatro, una exposición muy completa con todos los personajes de Roberto Gómez Bolaños.

Debido al enorme éxito de la primera temporada de la obra, decidieron reestrenarla en enero de 2020, una vez más. Hasta el momento, el espectáculo ha recibido quince premios de los Regional 2019 Awards. En Grupo Chespirito, nos sentimos muy orgullosos y agradecidos con Adriana del Claro y su extraordinario equipo por esta increíble producción que, con gran cariño y respeto, rinde homenaje a un referente de la comedia en México que estableció fuertes lazos afectivos entre todas las naciones de América –y algunos países de otros continentes– a través de sus personajes: nuestro querido Roberto Gómez Bolaños.